Nadar: Por qué la natación nos ayuda a vivir mejor

Portada
SUDAMERICANA, 2016 M11 1 - 192 páginas

¿Qué podemos aprender de la natación? ¿Nos puede convertir en mejores personas? Un libro para nadadores amateurs y profesionales que quieren aprender sobre los beneficios de la natación tanto a nivel físico como emocional.


La natación es el deporte más completo del mundo. Lo puede practicar cualquiera, sin importar su edad o su condición. Además de los beneficios en el plano físico, fortalece la autoestima, reduce el estrés y nos hace más felices. Pero, ¿cuál es la explicación? Nadar es el testimonio vital de quien se mantuvo durante una década entre los diez campeones del mundo. Desde sus inicios en el Club Taborín de Córdoba hasta ganar el oro en el Campeonato Mundial de 50 metros libre en Moscú y batir el récord argentino, José Meolans explica por qué la natación lo ayudó a ser más tolerante, paciente y responsable. ?De una simpleza brillante, el mejor nadador argentino comparte las enseñanzas que le dejó la natación para enfrentar todo tipo de retos.

Este libro está pensado tanto para los nadadores profesionales como para los amateurs; para quienes nadan desde bebés, los que se iniciaron hace poco y aquellos que, mientras leen estas páginas, se preguntan si están a tiempo de empezar. ¿Qué podemos aprender de la natación? ¿Nos puede convertir en mejores personas? La respuesta está aquí.

«Meolans es una de las personas más sanas y nobles que conocí a lo largo de mi carrera profesional. Esta obra no es ni más ni menos que otro paso en su constante búsqueda por construir un legado. Hoy José nos invita a nadar, lo que implica, también, invitarnos a pensar mejor. Puedo dar fe de ello.»

Gonzalo Bonadeo

Dentro del libro

Contenido

Sección 1
Sección 2
Sección 3
Sección 4
Sección 5
Sección 6
Sección 7
Sección 8
Sección 10
Sección 11
Sección 12
Sección 13
Sección 14
Sección 15
Sección 16
Sección 17

Sección 9

Términos y frases comunes

Acerca del autor (2016)

José Meolans nació el 22 de junio de 1978 en Córdoba. Su carrera como nadador de alto rendimiento comenzó muy temprano, y abarcó quince años de su vida. Durante una década se mantuvo entre los diez mejores del mundo. Hoy es el único nadador argentino campeón del mundo en piscina. Posee, además, 3 medallas en campeonatos mundiales de pileta corta, fue campeón panamericano -juegos en los que también conquistó 6 medallas de plata y una de bronce-, y semifinalista en los Juegos Olímpicos de Sídney 2000. En total, alcanzó 27 preseas en copas del mundo (12 de ellas, de oro). Es dueño de innumerables plusmarcas sudamericanas y nacionales, y fue campeón argentino de pileta larga en 53 oportunidades y campeón nacional de pileta corta en 73 ocasiones. Se retiró el 21 de diciembre de 2008 ostentando 19 récords argentinos absolutos (9 en piscina olímpica y 10 en pileta corta).

Información bibliográfica