Votos de un españolImprenta de Manuel Minuesa, 1869 - 147 páginas |
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Términos y frases comunes
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Pasajes populares
Página 7 - Las Cortes Constituyentes reformarán el sistema actual del gobierno de las provincias de Ultramar, cuando hayan tomado asiento los diputados de Cuba o Puerto Rico, para hacer extensivos a las mismas, con las modificaciones que se creyeren necesarias, los derechos consignados en la Constitución.
Página 122 - Aunque viles traidores le sirvan, del tirano es inútil la saña, que no en vano entre Cuba y España tiende inmenso sus olas el mar.
Página 53 - Este será el derecho del rey, que ha de mandar sobre vosotros : Tomará vuestros hijos, y los pondrá en sus carros, y los hará sus guardias de á caballo, y que corran delante de sus coches.
Página 53 - Tomará asimismo lo mejor de vuestros campos, y viñas, y olivares, y lo dará á sus siervos. «Y diezmará vuestras mieses, y los esquilmos de las viñas, para darlo á sus eunucos y criados.
Página 14 - Mas culpables del crimen de traicion son aquellos que , con solapada humildad y rastrera hipocresia, demandaron derechos politicos como el único remedio á nuestras discordias, y respondieron cuando les fueron concedidos con providencial ingratitud.
Página 57 - Mezía, quien dotado de inmensas fuerzas intelectuales le eclipsaba y vencía en las luchas parlamentarias. La vanidad y el orgullo ofendidos, y la ruin envidia que siempre nace al lado del talento, tuvieron mucha parte en los esfuerzos de Arguelles para cargar a Cuba de cadenas en 1836. Bien hicieron él y sus amigos en arrojar del Congreso a los cuatro Diputados cubanos, porque de este cortísimo número hubieran visto aparecer en aquella escena un habanero formidable que juntando a un entendimiento...
Página 94 - Yo condeno lo que se ha llamado el derecho insurreccional, por una reunión de palabras que se asombran de encontrarse juntas. Yo lo condeno vencido, y lo condeno de la misma suerte triunfante; porque no cabe, no puede caber en mi razón, que el éxito sólo lo santifique. Yo lo condeno, á la verdad, más unas que otras veces; pero nunca lo absuelvo, nunca le despojo de su carácter de ilegitimidad y de violencia.
Página 91 - SM con la lealtad de mi carácter ya impulso del más íntimo convencimiento, que las quejas de los cubanos son justas, que sus aspiraciones son legítimas, que no hay razón para que ellos, españoles como nosotros, no tengan prensa ni representación ninguna en su gobierno, ni una sola de las garantías constitucionales...
Página 50 - ... publicista bayamés me atraía, me fascinaba, era mi ídolo, y era, a la vez, la tortura de mi premiosa inteligencia. Con él, con su lógica demoledora aprendí a aborrecer de todo corazón el anexionismo. Su famosa frase: «El día que me lanzara en una revolución, no sería para arruinar mi patria, ni para deshonrarme yo, sino para asegurar su existencia y la felicidad de sus hijos», trastornaba mis ideas y me laceraba el corazón.